BOLIVIA (De nuestro Corresponsal) -- La Central Obrera Boliviana (COB), matriz de
los trabajadores, mineros, gremiales, maestros, profesionales y campesinos, ha
instruído y decretado una huelga general indefinida a partir de las cero horas del día
jueves l6, exigiendo la renuncia del mandatario Gonzalo Sánchez de Lozada (alias Goni).
Hoy en la ciudad de Cochabamba se produjeron graves hechos de violencia y choques entre el
ejército, la policía y sectores ciudadanos. Las rutas por vía terrestres de esa ciudad
y de Santa Cruz permanecen totalmente bloqueadas, y cientos de camiones que trasladan
productos provenientes del oriente boliviano a los puertos chilenos, están varados en los
límites de ambas ciudades. Santa Cruz vivió a su vez una jornada con marchas de
campesinos y obreros, que provocaron el cierre de mercados y tiendas con grave perjuicio
para el comercio e industria cruceña, que es la primera economía de Bolivia.
En la sede del gobierno se ha denunciado que personeros de la embajada de EE.UU. están
trabajando, asesorando y planificando todo el vasto operativo represivo contra la
ciudadanía desde el Estado Mayor del Ejercito, ubicado en la zona de Miraflores de la
ciudad de La Paz. Sectores influyentes solicitaron al gobierno la inmediata salida del
embajador americano por su abierta intromisión en los asuntos internos del país.
Las principales organizaciones sindicales del país, que están bloqueando carreteras y
calles, realizan permanentes manifestaciones, pese a la estricta y severa vigilancia que
mantienen las tropas del ejército y los efectivos de la policía en casi todas las
ciudades de Bolivia.
Hasta ayer la petrolera Repsol-YPF manifestaba que el proyecto de exportar gas desde
Bolivia seguía en marcha, pero hoy los ejecutivos de la firma española decidieron
paralizar "momentáneamente" dicho proyecto a raíz de las violentas protestas
que han dejado decenas de muertos y cientos de heridos en el país. Esta decisión
política de la empresa es vista desde el gobierno como un suceso que fortalece las
exigencias de la renuncia de Sánchez de Lozada y la transmisión institucional del poder
al vicepresidente Carlos Mesa.
En las últimas horas, la región oriental de Bolivia, que comprende a Santa Cruz,
Tarija, Beni y Pando, ingresó en la espiral de violencia que ya envolvía al resto del
país, sin que se vislumbre en el horizonte ninguna negociación ni diálogo posible entre
la sociedad civil y el debilitado gobierno de Sánchez de Lozada.
(Guillermo Teddy Elizalde para la Red Kalki)
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