BOLIVIA (De nuestro Corresponsal) -- El presidente de Bolivia, Carlos D. Mesa,
mediante decreto supremo anunció la venta de gas a la Argentina por el término de seis
meses, la cual estará desde adelante sujeta a los resultados del referéndum que tendrá
el pueblo boliviano acerca de la política de hidrocarburos, y no sólo de venta a
Argentina sino también a otros países.
Esta decisión gubernamental ha causado estupor en la opinión pública boliviana, por
cuanto el presidente Mesa hasta ayer había estado manejando este tema al vaivén de las
presiones populares y las transnacionales. Su decisión acerca de la venta del gas al
vecino país, tendrá efectos económicos positivos por cuanto los ingresos provientes de
dicha venta ingresará al Tesoro General de la Nación, que prácticamente está pisando
fondo.
La entrevista que debía realizarse en estos días entre el presidente Mesa y el
presidente argentino Kirchner ha sido suspendida hasta fines del presente mes, por cuanto
la enfermedad del mandatario argentino ha motivado dicha postergación. La reunión de los
dos mandatarios sudamericanos abre nuevas esperanzas en Bolivia no sólo por la venta del
gas, sino también por acordar otros beneficios bilaterales que en última instancia
siempre favorecerán en mayor grado a Bolivia.
La decisión tomada por Mesa después de haber superado la crisis de gabinete con el
cambio en cuatro ministerios, entre ellos, el de Hidrocarburos que estaba a cargo del Dr.
Antonio Aranibar, quien desempeñó la cartera de Relaciones Exteriores en el primer
gobierno de Sánchez de Lozada, ha fortalecido su gobierno. La opinión pública,
organizaciones sociales y partidos políticos criticaron duramente en el pasado al
presidente boliviano por la designación de Aranibar en la cartera de Hidrocarburos, por
cuanto Aranibar hasta antes de su posesión como ministro trabajaba para la Enron y otras
transnacionales como asesor, siendo a todas luces un absurdo que ahora, cuando se está
discutiendo la nueva ley de Hidrocarburos, Aranibar pudiera tener la fuerza moral
necesaria para defender los intereses bolivianos. Tampoco habían faltado voces populares
que manifestaron que la designacion del ex asesor de la Enron en la cartera de
Hidrocarburos era como darle queso al ratón o zanahorias a los conejos.
Dentro del aspecto político interno de Bolivia, existe una clara visión de que quien
maneja el gobierno es Evo Morales, jefe del Movimiento al Socialismo (MAS), por cuanto
cuando viaja al exterior, dá la impresión de que tiene el título de ministro de
Relaciones Exteriores; sus conversaciones y entrevistas con altos personeros de gobiernos
americanos siempre conducen a un convenio de cooperación a Bolivia. Tal es el caso de que
cuando Evo Morales viajó a Venezuela, se entrevistó con Hugo Chávez y después la
opinión pública boliviana se enteró que Morales consiguió un gran cupo de compra de
soya por parte de Venezuela. Si bien hay una inquietud por este aparente gobierno de
Morales, tampoco hay una crítica a esta situacion. El presidente Mesa posesionó este
martes a un ministro que es de clara tendencia del partido de Morales.
Otro aspecto que llamó poderosamente la atención de los bolivianos, fue el anuncio
del presidente Mesa de convocar a un referéndum para el 28 de julio, basada esta
decisión en sentido de que hasta la fecha el Congreso no tocó ni pensaba tocar este
tema, que fue una de las causas de la caída y posterior huída a Estados Unidos de
Sánchez de Lozada (Goni). Esta determinación, si bien fue recibida con atención por la
sociedad boliviana, no debe hacer olvidar que preparar un acto plesbicitario de tal
importancia requiere de mucho tiempo y tres meses no son suficientes para efectivizar el
clamor del pueblo boliviano en el Octubre Negro del pasado año.
De cualquier manera, el cambio de ministros, la salida de Aranibar que apenas duró 28
días en su cargo, los anuncios de aprobar la nueva ley de hidrocarburos y la venta de gas
a la Argentina, dan un respiro muy breve a Mesa, ya que transportistas de todo el país
ingresarán este jueves en una huelga general, rechazando el alza de $ 0.30 en los
carburantes. Diferentes organismos cívicos y sociales, están presionando al gobierno
para que resuelva sus problemas de orden económico que datan de mucho tiempo atrás. Las
próximas semanas para Mesa serán de un arduo y complicado panorama de gobernabilidad.
(Guillermo Teddy Elizalde para la Red Kalki)
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