BUENOS AIRES (RK) - La Argentina es
uno de los países más ricos del mundo en cuanto a la posesión de recursos naturales.
Por ejemplo, en nuestras tierras se han hallado casi todos los metales y minerales más
importantes, desde oro y plata hasta uranio, pasando por una amplia gama de elementos de
altísimo valor en el mercado industrial. Sin embargo, paradójicamente, el país no
ve los beneficios que estos recursos generan, debido a que las políticas antinacionales
que se vienen aplicando desde hace décadas le han hecho perder su soberanía sobre el
sector minero.
El día viernes 13 de
octubre, el Centro de Difusión Casa Patria presentó una conferencia audiovisual en la
que uno de los máximos expertos en el tema, el Lic. Leopoldo Markus, expuso con meridiana
claridad el panorama energético y minero argentino. Bajo el título "El saqueo
de nuestros recursos naturales", el disertante desarrolló y denunció los
pormenores de esta crítica situación, respaldando sus palabras con datos e información
obtenidos de los gobiernos nacional y provinciales, de las corporaciones internacionales y
de las organizaciones independientes que combaten la presencia de las mineras extranjeras.
Para el inicio formal
del acto, el Secretario del instituto, Dr. Claudio Fernández, invitó al público
presente a ponerse respetuosamente de pie para entonar las estrofas del Himno Nacional
Argentino, un momento distintivo de todo evento o ceremonia del CEDICAP. Luego resonaron
en el salón vibrantes "¡Viva la Patria!", y el Dr. Fernández
procedió a presentar al Lic. Leopoldo Markus con las siguientes palabras:
"El Lic. Leopoldo Markus es egresado
de la Facultad de Economía de la Universidad de Buenos Aires, y es una verdadera
autoridad en materia de Economía de la Energía, Minería y Economías Regionales. Es
asimismo analista político y financiero, y articulista en numerosos medios de
comunicación.
"Siguiendo
la obra de Abelardo Ramos, Markus fundó en el 2004 el Partido Socialista de la Izquierda
Nacional. Defensor de la Causa de Malvinas y de la Reconquista del 2 de Abril, rechaza el
sectarismo de lo que califica como la izquierda funcional al sistema y apoya
la unidad de todas las fuerzas verdaderamente patriotas del país. Es miembro del Foro
Antiimperialista de la Deuda Externa."
Al tomar su lugar
frente al auditorio, el Lic. Markus se desenvolvió con el estilo didáctico y la solidez
que sus largos años de docencia universitaria le otorgaron. Para poder explicar con
precisión el núcleo central de su disertación, es decir, el saqueo de los recursos
naturales, el orador apeló primero a dar un breve pantallazo sobre la evolución
histórica de la Humanidad en cuanto a su relación con las fuentes de energía.
Remontándose al
descubrimiento y uso del fuego por los primeros hombres, el disertante sintetizó cómo
las civilizaciones primigenias fueron comprendiendo y conquistando nuevos elementos, hasta
llegar al siglo XVIII, donde se empiezan a usar los combustibles, avanzando al siglo XIX,
donde el carbón adquiere un papel fundamental en las industrias y las máquinas de la
época, y pasando al siglo XX, en el cual el petróleo pasó a ser la fuente más
importante, pero al mismo tiempo terminó demostrando -ya situados en nuestro siglo XXI-,
que éste es tremendamente nocivo para el medioambiente y que además, debido a su
no-renovabilidad, el hombre debe encontrarle de manera urgente un sustituto antes de que
se agote.
Ahora bien, aún cuando es cierto que el petróleo se está terminando, el
conferencista explicó que su uso no es equitativo a nivel mundial, sino que hay un país
en particular que lo está despilfarrando: Estados Unidos. Esto es así, ya que el Lic.
Markus remarcó que "los norteamericanos son el 5% de la población mundial,
pero al mismo tiempo, representan el 25% del consumo planetario de hidrocarburos,
poseyendo el récord de tener un promedio de cuatro automóviles o camionetas por
casa".
El orador señaló
que Estados Unidos es una "potencia imperalista", y como tal, se ha
encargado junto a Inglaterra y otro puñado de potencias, de apropiarse de los grandes
medios de producción. Esta situación, graficó Markus, reconoce antecedentes en los
siglos pasados, en especial durante los tiempos de la expansión colonialista europea, que
"saqueó a Asia, Africa, y especialmente, a América". En el presente.
remarcó Markus, los hechos no han variado, y las naciones latinoamericanas intentan ser
condenadas a ser "simples proveedoras de materias primas", mientras los
países más poderosos mantienen el dominio sobre las industrias.
El disertante
observó que hubo y hay importantes rebeliones y resistencias de los pueblos a ese
accionar, rememorando el caso de "la reacción del Movimiento Nacionalista
Revolucionario de Bolivia, bajo cuya conducción los mineros se sublevaron y atacaron con
cartuchos de dinamita a los personeros de las patronales extranjeras". Este
movimiento fue reprimido por "orden directa de la embajada yanqui".
Adentrándose más en
el análisis del tema minero, Markus apuntó que en el sector hay cuatro categorías de
elementos a extraer:
- Metalíferos:
que son el oro, el estaño, el zinc, el uranio y otros.
- No metalíferos: que son todos boratos, especialmente utilizados por las
industrias.
- Rocas de aplicación: son los granitos, las cales, el cemento y similares, todos
ellos empleados en el ámbito de la construcción.
- Piedras preciosas: como es de imaginar, son las que se usan en la joyería. La
Argentina posee importantes vetas de estas piedras en la provincia de Catamarca.
¿Cuál es la situación de la Argentina en
cuanto a la minería? El Lic. Markus explicó: "la Argentina, pocos lo saben, es
la quinta potencia mundial en reservas mineras, con un potencial de 750.000 kilómetros
cuadrados de reservas, de los cuales apenas han sido explorados 150.000; Argentina hoy
mantiene activas unas 100 minas, las cuales abrió luego de haber avanzando sobre una
mínima parte de su territorio minero potencial. Haciendo algunos cálculos superficiales,
podemos afirmar que la suma de solo 8 o 10 de los citados emprendimientos alcanza el valor
de 250.000 millones de dólares". En forma clara, contundente y fundada, el
orador brindó así una imagen completa respecto de la inmensa riqueza que el país tiene,
una realidad que muchísmos compatriotas desconocen y que la mayoría de los medios de
comunicación y centros educativos del sistema colonialista se encargan de ocultar,
distorsionar o minimizar.
Seguidamente, el
conferencista proyectó un mapa en el cual estaban señalados todos los proyectos mineros
en curso, que en su totalidad están en manos de empresas extranjeras. Markus se detuvo en
los más representativos, aportando abundantes detalles sobre sus dueños y sus
exhorbitantes ganancias, y resaltando que el Estado Nacional, por el Código de Minería
vigente, no puede intervenir en forma directa en las operaciones de extracción, ya que
las disposiciones de la ley de fondo se lo prohiben. Dicha legislación fue sancionada a
principios del siglo XX por las autoridades liberales, y lamentablemente no ha sido
modificada en beneficio del país. Inclusive el orador pidió tener en cuenta que la
Argentina posee recursos mineros que no se limitan al oro, plata o metales similares y
bien conocidos, sino que también tiene enormes reservas de otros como, por ejemplo, el
litio, un elemento muy utilizado por la industria y que actualmente es llevado en enormes
cantidades a Estados Unidos a cambio del pago de regalías insignificantes.
Markus señaló que hasta fines de los '80
en Argentina regía el sistema de "extracción de galería", es decir, la
construcción de las conocidas galerías mineras que permitían llegar hasta el lugar
donde se encontraban los metales o piedras buscadas. El panorama, ya de por si negativo
debido al Código de Minería vigente, empeoró durante el gobierno menemista por culpa de
un trío político nefasto para los intereses argentinos en esta materia, compuesto por el
entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, el clan sanjuanino Gioja y el ex
gobernador riojano Angel Mazza. Ellos promovieron la ley 24.196 de "Inversiones
Mineras", que facilitó el masivo ingreso de las corporaciones transnacionales al
país y por la cual, entre otras cosas, también se modificó el sistema de extracción,
implantándose el de "a cielo abierto", que lisa y llanamente destruye las
montañas con enormes cargas de dinamita para alcanzar los elementos. El referido sistema
"a cielo abierto", prohibido por una enorme cantidad de naciones por sus
catastróficas consecuencias ecológicas, está funcionando en Argentina sin ningún tipo
de cuestionamientos por parte de las sucesivas autoridades.
Y si durante la
administración de Menem se sancionó la ley 24.196, Markus hizo hincapié en que bajo el
actual mandato de Cristina Kirchner se vetó una ley que buscaba proteger a los glaciares.
Esta decisión tuvo especial importancia para el proyecto Pascua-Lama, pergeñado por la
empresa anglosajona Barrick Gold, entre cuyos dueños se encuentra George Bush padre. El
orador remarcó los gravísimos riesgos que tendrá esta operación, inédita en el mundo,
ya que directamente quebrará nuestros glaciares para poder extraer las reservas de 17,8
millones de onzas de oro y 718 millones de onzas de plata que existen bajo su superficie.
En el proceso de eliminación de las montañas de hielo, la corporación arrojará enormes
cantidades de cianuro y ácido sulfúrico, por lo cual el suelo y el agua quedarán
envenenados para siempre.
Culminado el análisis del saqueo minero,
Markus hizo también una breve pero muy interesante referencia a la situación
energética, donde también demostró el asfixiante y escandaloso dominio que ejercen las
empresas transnacionales.
Luego de haber
expuesto magistralmente la trágica y colonial dimensión del problema, el disertante
sentenció que la única solución es que la Argentina asuma "el pleno control de
sus propios recursos y medios de producción", revirtiendo así el proceso de
extranjerización que Menem y los Kirchner profundizaron. En tal sentido, dijo que el
Estado debe adoptar medidas de carácter "revolucionario", y que las mismas
implican no sólo un cambio de leyes, sino además un auténtico cambio de estructuras.
Un cerrado y
sostenido aplauso del público presente fue la merecida respuesta a tan brillante y
patriótica disertación, tras lo cual se abrió una nutrida e interesante ronda de
preguntas, que fueron respondidas por el Lic. Markus con la sapiencia y claridad docente
que lo caracterizan.
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